Torres de Serranos

Torres de Serranos de Valencia

De estilo gótico valenciano, las imponentes Torres de Serranos constituyen uno de los mejores ejemplos de la arquitectura militar de la época. Eran una de las 12 puertas de la muralla nueva que protegía la ciudad de Valencia.

Se llaman Torres de Serranos porque miran al camino que dirige hacia la zona de la Serranía cuyos habitantes eran denominados los serranos. En el siglo XV para entrar por esta puerta había que pagar un impuesto o peaje por las mercancías que entraban o salían de la ciudad.

Se construyeron en sólo 6 años, del 1.392 al 1.398.

A los niños les fascina subir escaleras arriba hasta conquistar las almenas. Cuando lleguéis arriba del todo, estaréis a 33 metros de altura. Desde esa privilegiada atalaya podréis contemplar el foso defensivo que originalmente estaba cubierto de agua y una preciosa vista. A un lado, la ciudad vieja y al otro el cauce viejo del río Turia.

campana rota en las Torres de Serranos en ValenciaLa campana que está situada en la parte de atrás dicen y cuentan que fue la que alertó en 1.363 del ataque del rey de Castilla, Pedro I El Cruel. También cuentan que está rota desde 1.813 por un disparo del francés durante el asedio a Valencia. Sin embargo, estas torres, a diferencia de las de Quart, nunca sufrieron contienda militar alguna y por eso se conservan en tan buen estado.

Desde 1.586 hasta 1.888 se utilizaron como cárcel. A consecuencia de un incendio en la prisión de la ciudad hubo que trasladar allí a los presos. Desde noviembre de 1936 hasta abril de 1938, durante la Guerra Civil Española, las torres de Serranos sirvieron para conservar los tesoros artísticos del Museo del Prado. Solo de este modo se pudieron salvar de los bombardeos que caían sobre Madrid.