El jardín del Parterre es pequeño, pero muy interesante. Su creación es de 1850, por lo que estos son árboles monumentales. Entre el Parterre y el Parque de la Glorieta hay cuatro enormes ficus (Ficus Macrophylla) que llevan plantados ahí desde 1852. El que está situado junto a la gasolinera, tiene más de 24 m de altura y es el más monumental de los cuatro. Estos árboles fueron prácticamente las únicas especies que sobrevivieron a la terrible inundación de 1957. Los cuatro estanques redondos que había en sus esquinas también sufrieron numerosos daños. Al quedar tan estropeados decidieron desmontarlos y finalmente acabarían en los jardines de Parcent.
Estatua de Jaume I en El Parterre
El elemento más llamativo lo constituye la grandiosa estatua ecuestre de Jaime I que se pensó erigir para conmemorar el sexto centenario de su muerte. En 1875 la dirección del periódico Las Provincias lanzó la idea que fue aprobada por el ayuntamiento aunque únicamente si se realizaba por suscripción popular. Así se haría y, después de unos cuantos años, en 1891 fue finalmente colocada esta gigantesca estatua en su pedestal de 7 m de altura.
Para su realización fueron necesarias 15 toneladas de cobre que se consiguieron de 5 cañones y un obús enviados por el Ministerio de la Guerra. Este material salió de la fortaleza de Peñíscola.
En los laterales del pedestal hay dos leyendas que dicen:
Entró vencedor en Valencia
liberándola del yugo musulmán
el día de San Dionisio
IX de octubre de MCCXXXVIII
Y la otra: