La Catedral de Valencia se levanta sobre el solar de la antigua mezquita, que a su vez se construyó sobre los restos de la anterior Seo visigótica. Este templo comenzó a construirse en 1260. La primera piedra se colocó el 22 de junio de 1262. Las obras se prolongaron hasta bien entrado el siglo XVIII. Por ese motivo la Catedral de Valencia exhibe una mezcla de estilos que la caracteriza y que podemos comprobar simplemente observando las tres puertas principales.
La catedral de Valencia, mezcla de estilos
- La puerta del Palau o de la Almoina, orientada al este, la más antigua, de estilo románico. Comenzó a construirse en 1262. Interesantísimo observar justo bajo el alero del tejadillo, los retratos en piedra de seis matrimonios con sus nombres escritos. Son personajes de la época de la repoblación cristiana de tiempos de Jaume I.
- La puerta de los Apóstoles orientada al oeste, da a la plaza de la Virgen. Es de estilo gótico y se construyó entre los siglos XIII y XIV. En esta puerta se siguen reuniendo todos los jueves a las 12 de la mañana el Tribunal de las Aguas. Este es un organismo de justicia y resolución de pleitos sobre el agua de riego. Lleva funcionando desde alrededor del año 900, no se conoce la fecha exacta. Cabe destacar en lo alto de la portada el magnífico rosetón con el dibujo en piedra de una perfecta estrella de David y la cruz en su centro.
- La puerta de los Hierros se comenzó en 1703 y es de estilo barroco. Está orientada al sur y sale a la plaza de la Reina y al Miguelete. Tiene toda la apariencia de un retablo de altar y está dedicada a la exaltación de la Virgen y de los santos valencianos San Vicente Mártir y San Vicente Ferrer.
- A finales del siglo XVIII alguien pensó que el gótico era obra de bárbaros y decidieron volver al clasicismo. Por este motivo quisieron dar al edificio un aspecto neoclásico, tanto a la estructura como a elementos ornamentales. Las obras de remodelación comenzaron en 1774. Pero lo que son las cosas, un par de siglos más tarde, en 1972 tuvo lugar otra actuación importante para tratar de eliminar todos elementos neoclásicos y devolver al edificio su aspecto gótico original.
